Frente a la pandemia y ambientes laborales exigentes, los suplementos anti estrés empiezan a afianzarse en México como una opción segura en oficinas, espacios deportivos, universidades y en el hogar.
Cada vez es más común escuchar de suplementos con base en magnesio, ashwagandha u otros componentes contra el estrés. Y en esa competencia, el CBD (cannabidiol) cada vez gana más terreno en las preferencias de los usuarios.
El CBD, que no produce efectos psicotrópicos, es seguro y su consumo es legal, tiene un currículum que cuenta con más de 4.6 millones de dólares en ganancias en 2020 en Estados Unidos y una proyección para 2024 de 20 mil millones en ese país (según pronósticos de BDS Analytics y Arcview Market Research).
Este crecimiento obedece a que el público cada vez más se desprende de los prejuicios sobre este componente derivado de la familia de la cannabis y que vale la pena decir, se obtiene del cáñamo y es ajeno a la marihuana. En el caso del CBD, según datos de la Organización Mundial de la Salud, no representa riesgos para la salud y es seguro en poblaciones vulnerables, como personas adultas mayores o menores de edad.
Más allá de las ganancias en el extranjero, el CBD sabe convencer al sector privado mexicano. La marca CBDbies, pionera en este campo en el país, ha recibido apoyos en espacios tan importantes como Shark Tank México, donde consiguió una inversión sustancial.
En nuestro país las victorias que está teniendo el CBD han proyectado un valor de 275.8 millones de dólares para 2025, como lo muestra el análisis de la consultora Grand View Research.
Además de su efectividad como producto que relaja y ayuda al mejor funcionamiento de las células del cuerpo, el CBD tiene una gama amplia de productos como las cápsulas de CBDbies+ Vitaminas A, C y D, gotas, bálsamo o incluso confitados como las gomitas Dormitas de CBDbies.
Otra predicción bastante favorable por parte de Brand Essence Market Research, es que con una tasa de crecimiento anual compuesto (CAGR, por sus siglas en inglés) del 82.59%, el mercado de CBD en México podría alcanzar un nada despreciable valor de 675,48 millones de dólares para 2027. En un contexto de reactivación económica, estas predicciones son alentadoras.
Este mismo estudio señala que entre los factores que benefician el avance del CBD en México están la creciente adopción de productos del cáñamo, la utilidad del CBD en el sector farmacéutico y la demanda de productos de belleza con este componente.
En España, por ejemplo, productos como la leche corporal y las cremas ya se abren paso en el mercado; en Argentina, aceites y perfumes con CDB encuentran su lugar entre los consumidores; en Canadá se distribuye crema para el dolor y en Japón el aceite de CBD se ha vuelto popular entre algunos sectores de la población.
Los argumentos a favor del cannabidiol no solo convencen a la gente interesada en invertir en empresas de la industria; en un mundo globalizado, el regreso a lo natural adquiere más fuerza dentro del mercado y de la vida de las personas, quienes desean dormir, descansar, relajarse y mejorar su calidad de vida.
Frente a la pandemia y ambientes laborales exigentes, los suplementos anti estrés empiezan a afianzarse en México como una opción segura en oficinas, espacios deportivos, universidades y en el hogar.
Cada vez es más común escuchar de suplementos con base en magnesio, ashwagandha u otros componentes contra el estrés. Y en esa competencia, el CBD (cannabidiol) cada vez gana más terreno en las preferencias de los usuarios.
El CBD, que no produce efectos psicotrópicos, es seguro y su consumo es legal, tiene un currículum que cuenta con más de 4.6 millones de dólares en ganancias en 2020 en Estados Unidos y una proyección para 2024 de 20 mil millones en ese país (según pronósticos de BDS Analytics y Arcview Market Research).
Este crecimiento obedece a que el público cada vez más se desprende de los prejuicios sobre este componente derivado de la familia de la cannabis y que vale la pena decir, se obtiene del cáñamo y es ajeno a la marihuana. En el caso del CBD, según datos de la Organización Mundial de la Salud, no representa riesgos para la salud y es seguro en poblaciones vulnerables, como personas adultas mayores o menores de edad.
Más allá de las ganancias en el extranjero, el CBD sabe convencer al sector privado mexicano. La marca CBDbies, pionera en este campo en el país, ha recibido apoyos en espacios tan importantes como Shark Tank México, donde consiguió una inversión sustancial.
En nuestro país las victorias que está teniendo el CBD han proyectado un valor de 275.8 millones de dólares para 2025, como lo muestra el análisis de la consultora Grand View Research.
Además de su efectividad como producto que relaja y ayuda al mejor funcionamiento de las células del cuerpo, el CBD tiene una gama amplia de productos como las cápsulas de CBDbies+ Vitaminas A, C y D, gotas, bálsamo o incluso confitados como las gomitas Dormitas de CBDbies.
Otra predicción bastante favorable por parte de Brand Essence Market Research, es que con una tasa de crecimiento anual compuesto (CAGR, por sus siglas en inglés) del 82.59%, el mercado de CBD en México podría alcanzar un nada despreciable valor de 675,48 millones de dólares para 2027. En un contexto de reactivación económica, estas predicciones son alentadoras.
Este mismo estudio señala que entre los factores que benefician el avance del CBD en México están la creciente adopción de productos del cáñamo, la utilidad del CBD en el sector farmacéutico y la demanda de productos de belleza con este componente.
En España, por ejemplo, productos como la leche corporal y las cremas ya se abren paso en el mercado; en Argentina, aceites y perfumes con CDB encuentran su lugar entre los consumidores; en Canadá se distribuye crema para el dolor y en Japón el aceite de CBD se ha vuelto popular entre algunos sectores de la población.
Los argumentos a favor del cannabidiol no solo convencen a la gente interesada en invertir en empresas de la industria; en un mundo globalizado, el regreso a lo natural adquiere más fuerza dentro del mercado y de la vida de las personas, quienes desean dormir, descansar, relajarse y mejorar su calidad de vida.