Un gran legado como el del cognac LOUIS XIII, que se caracteriza por su excelencia y perfección, sólo puede preservarse a través de una herencia excepcional de conocimientos específicos, que deben asimilarse y ejecutarse por las manos de los Maestros Bodeguero.
Los Maestros Bodeguero son los responsables de transformar los regalos que brinda la naturaleza en el estilo característico de LOUIS XIII. Como si se tratase de un legado familiar, el conocimiento se hereda de generación en generación, el cual va perfeccionándose con el paso del tiempo, sin dejar atrás, a su vez, todos los atributos que ofrece el pasado.
Así, en 2014, la Maestra Bodeguera Pierrette Trichet, quien trabajaba en la creación de este cognac desde 1976 y fungió como Maestra Bodeguera de 2003 a 2014 –además de ser la primer mujer Maestra Bodeguera frente de una casa de cognac–, cedió la batuta al joven pero experimentado Baptiste Loiseau cuando tenía 34 años (39 actualmente), convirtiéndolo así en el Maestro Bodeguero más joven en la historia de la marca. El nombramiento oficial de Loiseau se llevó a cabo en Cognac, región que ofrece las características específicas para crear una bebida como LOUIS XIII, y lugar de nacimiento del propio Loiseau.
Agrónomo de formación, Baptiste Loiseau respondió a una vocación que estuviese más cerca de aquello que alimentaba mejor su espíritu: la gente y la naturaleza. Viajó durante años por cientos de viñedos de Francia, Sudáfrica y Nueva Zelanda para ampliar sus horizontes sobre enología, aprendiendo así acerca del desarrollo de diferentes uvas en otros climas.
En 2005, regresó a su lugar de origen y comenzó a trabajar en la casa de la que proviene el cognac LOUIS XIII. Desempeñó un trabajo excepcional en la histórica sala de degustación, probando más de 2 mil eaux-de-vie. Ahora, como Maestro Bodeguero, recuerda esta experiencia como “un rito y una experiencia humilde” que le mostró la importancia de cada uno de los responsables del proceso de creación de este cognac.
Así, Baptiste Loiseau tiene un grado de involucramiento importante como Maestro Bodeguero en cada una de las áreas que conducen al rey de los cognacs. En la cosecha, como último eslabón en una cadena que comienza en la naturaleza, Loiseau se acerca a la tierra de Grande Champagne para percibir, desde un principio, los atributos de esa materia prima con la que trabajará más adelante. Durante la destilación, el Maestro Bodeguero espera pacientemente a que se le entregue el corazón del destilado final para posteriormente seleccionar, con ayuda del comité de cata, las muestras de mayor calidad. En esta siguiente etapa, la de la cata, se valoran, aprecian y evalúan cada uno de los eaux-de-vie para encontrar ese elemento, esa característica especial que revela el estilo distintivo de LOUIS XIII.
Ya en los últimos pasos de este proceso artesanal, el envejecimiento y el blend, el Maestro Bodeguero asume un papel protagónico. Los eaux-de-vie seleccionados se embarrilan para que el tiempo haga su trabajo, quizá el más importante en todo el desarrollo. Más adelante, Baptiste Loiseau llevará a cabo una mezcla que esté compuesto de la fuerza, la armonía y la elegancia que caracteriza a LOUIS XIII.
La función del Maestro Bodeguero es preservar la herencia de LOUIS XIII y transmitirla a la siguiente generación. Cada uno de ellos, como lo hace actualmente Baptiste Loiseau, prepara el futuro al seleccionar eaux-de-vie nuevos con el mejor potencial y que formarán parte de LOUIS XIII.